viernes, 14 de agosto de 2009

Como un arbol

Me desojo lentamente
en la estación del amor,
una lágrima cae en la vereda
y nunca más volverá a nacer.
La raiz se deteriora con los fracasos
y el tiempo no ayuda como antes,
siento esa brisa helada cuando respiras
que congela mi cuerpo y me deja inmóvil.
Mis brazos se debilitan
y tu aliento me deja sin fuerzas,
mi piel se descascara poco a poco
y el calor penetra en mi alma.
No es es suficiente que riegues con ilusiones
mi espiritu vencido y moribundo.
el destino está marcado
desde el principio de los tiempos,
aunque el reloj siga su marcha
y todo siga sin mi...
estuve ahi por una razón.
En esa esquina dejé mi huella
tallaste tu nombre en mi,
aunque haya dolido y tardó en cicatrizar
me elegiste para llevarte en mi.

Después

Después del tiempo que pasó
que sólo me dejó tu recuerdo,
la imágen de tu sonrisa cálida
y de tus labios húmedos y filosos.
Después del dolor del corazón
que intentó refugiarse en tu abrazo,
que pidió a gritos comprensión
y un sendero mejor para la razón.
Después de que mis ojos
discutieran con mis manos,
el precio que pagarían
por anhelar tu figura.

Después de lo ocurrido
después de lo vivido,
me toca afinar día a día
la guitarra del olvido.

Después de una noche de pasión
después de un dia de amor,
este hueco se hace más profundo en mi
aunque se valla llenando sin razón.
Después... sólo después
sabrás y sabré
verás y veré
si me amaste y si te ame.
Después del olvido
después del que el destino
nos marque el camino,
sólo después y ahi sabremos
si vale la pena tu dulce condena.

A esconidas

Que esta pasando a mi alrededor?
Que esta pasando en mi interior?
Cuantas dudas y preguntas
Que no encuentran solución.
Todo es incierto en este mundo
Las idas y venidas de la vida,
Me mantienen dando vueltas
Desconcertada y perdida.
Las palabras no significan nada
Los hechos no llenan espacios,
Todo se desborda en el alma
Y mis manos rebalsan de pasión.
Los gritos rompen las paredes
De mi ser, cabeza y cuerpo
Todo inundado por estas lagrimas
Que cegaron mis ojos por llorarte tanto.
Jugué mis ultimas chances y
Aposté todo lo que tengo es esta mano,
Maldita suerte la mia y maldita esa partida
Que me dejó tan vacía…

Mentiras para no lastimar al resto
Mentiras que no saben de sinceridad,
Mentiras para hacernos felices
Mentiras para no olvidar.

Cuantas sonrisas cómplices
Miradas ocultas tras un cristal,
Caricias prohibidas y estremecedoras
Cuanta locura que sólo entendemos los dos.
Batallas ganadas entre tus sabanas,
Guerras perdidas para no afrontar
Lo batallones que nos desafiaban
Con descubrir nuestra verdad.
Como el más filoso cuchillo
Me corta la respiración,
El calor y olor de tu piel
Me dejan sin aliento…
No puedo dejar esta adicción!
Aposté todo lo que tengo en esta mano
Y perdí mis últimas chances,
Maldita suerte la mia y maldita esta partida
Que me dejo llena de vida…